Alberto Valdivia Baselli

 

En la plaza
ha muerto la sombra
el ojo tarde
ha regresado a ver
la sombra deslizándose en las cavernas
de cemento y neón
un ojo de luz
que otea bajo las ramas de metal.
 
Entre las ruinas
dos hombres tienden
su caos y espejismos otros
cosidos de piel y carne
que otro espejismo descreería
mientras lo tendido pierde valor de mercado
mientra gotea la mente sobre el precio
de dos zapatos brillantes
atados a la cadena de la voz.
 
Un caos puede perder precio si otro
más complejo y atractivo
ingresa en el mercado con pulimentos
el jinete sabe precios
el jinete ha muerto y sabe precios
los precios saben del jinete y se repliegan
en el sonido de sus cascos
guardan sueños y despedidas
que torpemente repiten en el eco
con que el jinete agujerea el aire mercantil
y álgido de metales
mientras se retira
y la sombra
siempre sombra
muere entre dos hombres que regatean
ruinas a su ojos.